El Sector de Enseñanza de UGT Servicios Públicos se reúne estos días en Reikiavik (Islandia) con el secretario de Estado de Educación español y con el resto de las organizaciones sindicales y los ministerios de educación de diferentes países, en la Cumbre Internacional de la Profesión Docente.
El objetivo fundamental de esta cumbre es establecer compromisos, entre gobiernos y sindicatos de la educación, para mejorar y fortalecer la profesión docente y potenciar una educación de calidad como elemento clave para la prosperidad y el bienestar del del profesorado y el alumnado.
Desde nuestro sindicato, somos testigos de que la evolución de la tecnología y de la sociedad en su conjunto plantea nuevos retos a la hora de afrontar la convivencia y el bienestar de toda la comunidad educativa.
Por ello, desde el Sector de Enseñanza de UGT Servicios Públicos consideramos que garantizar el bienestar del profesorado es el soporte fundamental para que se desarrolle una educación de calidad, inclusiva, diversa y equitativa.
En nuestra intervención hemos insistido en la prioridad de establecer políticas educativas que contribuyan a tres aspectos claves:
- Reforzar la confianza en el profesorado y revalorizar su función humana como agente de transformación social
- Dignificar la profesión docente y la educación pública con financiación estable y suficiente
- Garantizar la mejora de las condiciones laborales del profesorado para cuidar y hacer más atractiva la profesión.
Con respecto a este último punto, hemos reivindicado, entre otras cuestiones, disminuir la jornada lectiva y las ratios para poder atender las diversas necesidades educativas individuales del alumnado, disminuir la burocracia, mejorar las retribuciones, la inclusión de todos los cuerpos docentes no universitarios al subgrupo A1 y ofrecer una formación al profesorado adecuada, en base a las nuevas demandas de nuestra sociedad.
En este sentido, la inclusión de la inteligencia artificial en el ámbito educativo, éticamente orientada y con responsabilidad social, es una oportunidad para fortalecer el trabajo colaborativo entre iguales y para generar redes de apoyo (de profesores y estudiantes) que contribuyan a implementar nuevos recursos para superar dificultades de aprendizaje, de convivencia y de brecha social y generacional.
Pero el gran desafío es ofrecer al profesorado el tiempo y los recursos suficientes para poder transitar esta gran revolución digital en la que nos encontramos, reforzando las competencias socioemocionales como base del bienestar, para no devaluar y sobrecargar la labor tan importante que cada día los docentes ejercen en sus aulas.
Desde nuestro sindicato seguiremos trabajando para alzar la voz del profesorado en la defensa y la mejora de sus condiciones laborales, pues hoy más que nunca el bienestar de los docentes debe ser la base para el bienestar de nuestros estudiantes y para la mejora de la calidad de la educación.
