El epidemiólogo jefe de Suecia y el arquitecto de su enfoque ligero del coronavirus han reconocido que el país ha tenido demasiadas muertes por Covid-19 y debería haber hecho más para frenar la propagación del virus.
Anders Tegnell, que había criticado previamente los estrictos bloqueos de otros países como no sostenibles a largo plazo, dijo a la radio sueca el miércoles que » evidentemente, lo podrían haber hecho bastante mejor» en Suecia.
Cuando se le preguntó si había habido demasiadas muertes en Suecia, respondió: «Sí, absolutamente», y añadió que el país tendría que considerar en el futuro si había habido una manera mejor de prevenir tantas muertes.
La tasa de mortalidad por millon de habitantes en la última semana (27 mayo-2 junio) ha sido la más alta del mundo según aparece en el siguiente cuadro.
«Si volviéramos a encontrarnos con la misma enfermedad sabiendo exactamente lo que sabemos sobre ella hoy, creo que haríamos algo intermedio entre lo que Suecia hizo y lo que el resto del mundo ha hecho», dijo Tegnell.
Basándose en el sentido del deber cívico de sus ciudadanos, Suecia cerró las escuelas para todos los mayores de 16 años y prohibió las concentraciones de más de 50, pero sólo sugirió, en lugar de ordenar, a las personas que evitaran los viajes no esenciales. Tiendas, restaurantes y gimnasios han permanecido abiertos.
Las 4.468 víctimas mortales de Suecia de Covid-19 representan una cifra de muertos de 449 por millón de habitantes, en comparación con 45 en Noruega, 100 en Dinamarca y 58 en Finlandia. Su recuento por millón sigue siendo inferior a las cifras correspondientes de 555, 581 y 593 en Italia, España y el Reino Unido, respectivamente.
Tegnell dijo a la radio sueca que todavía no estaba claro exactamente lo que el país debería haber hecho de manera diferente, o si las restricciones que impuso deberían haber sido introducidas simultáneamente en lugar de paso a paso.
«Otros países comenzaron con muchas medidas a la vez. El problema con eso es que realmente no sabes cuál de las medidas que has tomado es más eficaz», dijo, y añadía que habría que sacar conclusiones sobre «qué más, además de lo que hicimos, podrías hacer sin imponer un cierre total».
A pesar del objetivo declarado de proteger a los ancianos de la nación, la estrategia de Suecia ha sido particularmente catastrófica para este grupo de edad, con aproximadamente la mitad de las muertes del país hasta ahora en hogares de cuidados.
Otro error clave fue asumir que el coronavirus se comportaría como gripe estacional. «No se comporta como la gripe en absoluto», dijo. «Se propaga más lentamente y tiene un tiempo de incubación más largo. Esto hace que sea más difícil detectar y crear inmunidad en la población».
Noticia de The Guardian (ver).
