El sindicato de Enseñanza de UGT propuso, a comienzos del siglo XX, un modelo educativo, truncado por la Guerra Civil y la Dictadura, que hoy en día presenta mayor vigencia que nunca.
Sin embargo, hay que destacar diferencias sustanciales entre ambos momentos. A principios del siglo XX, España iniciaba tímidamente el camino hacia la modernización y la enseñanza obligatoria aún no se había instituido, ni mucho menos una red pública de centros, y el profesorado adolecía de una mínima formación homogénea.
Los retos a los que se enfrenta la institución educativa del siglo XXI no pueden ser más diferentes y la formación universitaria del profesorado, afortunadamente, está consolidada.
En este contexto es en el que cobra un nuevo sentido la propuesta del modelo de Cuerpo Único que defendía la UGT que debe partir de una premisa inicial: la incorporación de todos los cuerpos docentes al subgrupo A1 con revisión de los complementos de destino en el reconocimiento, al menos, de niveles 24 para infantil y primaria, 26 para secundaria y 27 para catedráticos e inspectores. Nuestra propuesta se fundamenta en la misma exigencia de titulación, procedimiento de ingreso y responsabilidades similares.
