Exigimos al Presidente de Gobierno que cumpla con lo que prometió el pasado verano 21 julio 2022 en el Debate del Estado de la Nación y se inicie el proceso de aprobación parlamentaria de esta norma.
“…Fuego apagado, humo acabado…” Los bomberos/as forestales estamos muy acostumbrados a pasar de héroes a olvidados, de hecho se repite cada año esta condición de invisibilidad intermite. O hablando en plata de esta ¡TOMADURA DE PELO!
– El pasado 21 de julio el Presidente Sánchez anunció a Bombo y Platillo, en el debate del estado de la Nación una serie de medidas pensadas para proteger a la clase media trabajadora y a la mayoría social de este país. Y entre ellas un “Nuevo marco regulador estatal básico del personal de prevención y extinción de incendios, para ganar en eficacia en la lucha contra los fuegos.”
– El 22 de noviembre de 2022 el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, (MITECO) presenta en Consejo de Ministros un Anteproyecto de ley básica de Bomberos/as Forestales, del que ¡misteriosamente!, nadie sabe que ha sido de él.
– El año 2022 finalizó con cifras récord en cuanto a hectáreas quemadas en España, con el dato de 268.000 ha., 57 Grandes Incendios forestales (triplicando las cifras de media del último decenio), 4 fallecidos, más de un centenar de accidentados y miles de evacuaciones.
– Es 2023, y hemos solicitado información al respecto al Secretario de Estado del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Hugo Moran, sin obtener respuesta alguna.
El tiempo político corre ahora muy deprisa y, mucho nos tememos, que sean otros asuntos los que tengan más intereses hasta el cierre de la legislatura, que regular la discriminación y disparidad que sufren las y los bomberos forestales en España.
Estamos hartos de escuchar a la sociedad y a los partidos políticos, de todo signo y ámbito territorial, decir que “los incendios se apagan en invierno” y que no hay que legislar en “caliente”, pero tampoco lo hacen en “frio”. El trabajo preventivo de adecuar nuestras masas forestales a los Incendios Forestales, es la gestión tan necesaria y básica para nuestros montes. Pero es que además, comprobamos como el cambio climático está haciendo nuestro paisaje muy vulnerable también en la época invernal, por lo que las bomberas y bomberos forestales atendemos cada vez más Incendios Forestales en la época invernal, pero sobre todo las contingencias que suceden en el medio natural y rural, como son las nevadas,
inundaciones, búsqueda de desparecidos, contribuimos a rescates, y un largo etcétera. Es decir, participamos y colaboramos en todas las emergencias, las cuales cada vez son más habituales debido al empeoramiento climático.
Seguro que también los políticos pensarán que poco podemos presionar en nuestros trabajos con movilizaciones, paros, huelgas, etc., ahora en invierno, puesto que muchas comunidades autónomas despiden a más de la mitad de los compañeros, con la excusa de que hay menos fuegos. Por lo que asunto olvidado.
Desde esta unidad de acción, en un acto de responsabilidad descartamos hacer movilizaciones en periodo estival, cuando el riesgo es alto, muy alto o extremo debida a la emergencia que suponen los Incendios Forestales, y hoy comprobamos que lamentablemente quizá habría sido la única manera de ser oídos y tenidos en cuenta.
Hoy pedimos el apoyo de la sociedad y de los medios de comunicación. Por los motivos de sobra ya explicados. Pero sobre todo porque es a los ciudadanos y las poblaciones en su conjunto los que protegemos con nuestros servicios.
Por lo que les pedimos que nos apoyen y respalden en esta Concentración que realizaremos el próximo 28 de febrero.
Planteada como una “Acciones de recuerdo” que, ahora que es el momento, llevaremos a cabo ante el Ministerio Transición Ecología y Reto Demográfico, para que el Gobierno inicie sin demora el trámite legislativo.
Pero también para que los demás partidos políticos con representación (e indirectamente los gobiernos autonómicos) no pongan impedimentos con enmiendas y argucias (legales, competenciales, corporativas, presupuestarias…), y que de una vez por todas sienten normativamente las bases mínima sobre las que poder desarrollar un cuerpo de Bomberos/as Forestales profesional, y Agentes medioambientales, capaz de hacer frente a los retos que por desgracia el cambio climático, la despoblación y el abandono de nuestro medio natural y rural nos depara para el futuro.