El Sector de Enseñanza de UGT Servicios Públicos considera un éxito el seguimiento que han tenido las protestas contra el bloqueo del convenio de Educación Infantil, tanto las llevadas a cabo en los centros de trabajo como ante la sede de la organización patronal mayoritaria de escuelas infantiles, que ayer reunió en Madrid a varios cientos de trabajadoras y trabajadores del sector, que en su mayoría vestían camisetas de color negro.
La concentración celebrada en Madrid pretendía trasladar a la patronal el malestar de UGT Servicios Públicos por la manera en la que se está llevando a cabo la negociación del XIII Convenio colectivo de escuelas infantiles, además de para reclamar la mejora del poder adquisitivo y la dignificación de las condiciones laborales y de reconocimiento social de las trabajadoras y trabajadores del sector.
Después de casi once meses desde el inicio de las negociaciones, UGT constata que no hay avances de ningún tipo, por lo que considera que se puede hablar de bloqueo técnico, dado que, aunque se producen reuniones de manera constante, los acuerdos son inexistentes.
Nuestro sindicato denuncia que las numerosas organizaciones patronales que forman parte de la comisión negociadora, consecuencia de la amplia tipología de centros de trabajo a los que representan (escuelas privadas, de gestión indirecta, fundaciones y obras sociales o concertadas), están dificultando el poder alcanzar acuerdos que desbloqueen asuntos como los incrementos salariales, lo que está produciendo una evidente pérdida de poder adquisitivo de las trabajadoras y trabajadores.
Para las escuelas de gestión indirecta, la propuesta de UGT, aceptada por la patronal mayoritaria, incluía incrementos de hasta un 20%, de tal modo que el colectivo de maestras superaría los 1 660 euros al mes, 1 360 las educadoras y 1 245 las auxiliares. El objetivo último de nuestra propuesta es alcanzar en tres tramos la homologación gradual con las trabajadoras de la educación infantil pública.
Hay que recordar que más del 40 % de las empresas del sector ofrecen un servicio público de gestión indirecta para las Administraciones públicas, que aglutinan hasta el 60% de las plantillas de educación infantil privada.
UGT reclama para las escuelas infantiles totalmente privadas un incremento salarial de un 11 % repartido entre los años 2022, 2023 y 2024, además de la creación de un nuevo complemento adicional trianual del 3% sobre el salario base, que se empezaría a aplicar en enero de 2025.
Para los antiguos centros de obras sociales, propias de carácter docente sin fines lucrativos y Cajas de Ahorros, y dadas sus especiales características, UGT demanda el mantenimiento del histórico 1 % de incremento adicional sobre lo que se aumente a las trabajadoras del sector.
UGT servicios públicos trasladará a la mesa de negociación, que se reunirá de nuevo el 29 de junio, el deseo expresado en las concentraciones de ayer de pedir avances sustanciales para las trabajadoras y trabajadores, que son la esencia del proceso educativo en la educación infantil.
