Ante las informaciones que están saliendo desde distintas unidades de Correos en las que la jefatura está trasmitiendo la intención de la empresa de llevar a cabo un recorte en la contratación de entre 2000/3000 efectivos. Al margen de la exactitud de las cifras, lo único cierto es que parece existir la voluntad de la Dirección de aplicar un recorte en la plantilla, vía disminución de la contratación que ocupa puestos de trabajo estructurales.
UGT ha enviado hoy día 10 de marzo, carta al Presidente, solicitando explicaciones al respecto, así como la convocatoria urgente de la Comisión de Empleo Central para tratar en detalle los argumentos y las razones que sustentan la potencial medida expresando nuestro rechazo a que, los motivos en los que se pueda basar la actuación, no se hayan tratado dentro del ámbito de información, dialogo y negociación establecidos legalmente y por otra parte, a que se pretenda aplicar la decisión sin valorar las repercusiones y sin buscar otras posibles soluciones.
De llevarse a cabo esta medida (de la cual, insistimos, no hemos sido informadas –que UGT sepa– ninguna de las Organizaciones Sindicales) ello supondría un nuevo perjuicio para muchos empleados y empleadas que ya están soportando sobrecargas en sus unidades de trabajo y además acarrearía un deterioro en la calidad del servicio, así como en las condiciones de trabajo en general.
En opinión de UGT, debería haber margen para el dialogo con los Sindicatos para evaluar las consecuencias de la disminución de una parte de la actividad postal y buscar fórmulas que posibiliten mitigar el impacto de este hecho.
Pero lo que no es de recibo son las actuaciones a hecho consumado, que vienen proliferando demasiado en Correos en esta última etapa, sin respetar el papel legítimo de los sindicatos, máxime cuando se trata de un equipo directivo designado por un gobierno progresista, del cual cabe esperar una sensibilidad especial en el tratamiento de las relaciones laborales y sindicales en una empresa pública (prestadora, que no se le olvide a los “logísticos” recién llegados, de un servicio público).
Es obvio que la cuenta de resultados es muy importante en cualquier empresa, pero también es obvio que la receta no puede ser la de buscar el equilibrio financiero SOLO a través de recortes en el gasto de personal. Sobre todo mientras se sigue publicitando en los discursos que el “valor estratégico de Correos son sus empleados y empleadas”.
Cualquier estrategia que se base en debilitar el “valor estratégico de Correos” a juicio de UGT, es suicida y además perniciosa para cualquier objetivo, aunque sea bienintencionado, de mejorar la situación actual y de desarrollar un proyecto de futuro (en el que estamos TODOS implicados) que garantice la viabilidad de Correos.
UGT espera una REFLEXIÓN por parte de quien corresponde tomar las decisiones y que, de entrada, se asuma que los trabajadores y sus legítimos representantes (los sindicatos) TAMBIEN forman parte de las soluciones “estratégicas” imprescindibles, para construir el Correos del futuro, moderno, avanzado, eficaz y eficiente, que demandamos TODOS (no solo los muy altos directivos).