CCOO Y UGT EXIGEN DEPURAR RESPONSABILIDADES TRAS CONOCERSE QUE
DURANTE UNA SEMANA CIRCULARON
CARTAS-BOMBA EN CORREOS
SIN QUE NADIE INFORMARA, ADVIRTIERA Y ACTUARA
El 30 de noviembre conocimos por la prensa la noticia de la existencia de paquetes conteniendo artefactos explosivos, dirigidos a diferentes destinatarios en Madrid y Zaragoza. Tras reconocer fuentes gubernamentales (NO así la Empresa) que todos los envíos se habían admitido, cursado y entregado por personal de Correos, Y QUE EL 24 DE NOVIEMBRE YA SE TUVO CONOCIMIENTO DE LA EXISTENCIA DE QUE EL PRIMER ARTEFACTO EXPLOSIVO
HABÍA CIRCULADO POR NUESTRA RED, hasta ser entregado en su destino -el Palacio de la Moncloa- sin haber sido detectado.
Para CCOO y UGT, si la secretaria de Estado de Seguridad informa que “ese mismo día (el 24 de noviembre) se dieron instrucciones a la Guardia Civil y la Policía Nacional para que se extremasen las medidas de protección de las administraciones y edificios públicos”, entonces la pregunta es…
¿Por qué se permitió que DURANTE UNA SEMANA siguieran circulando cartas bomba en Correos sin que NADIE dijera ni hiciese NADA para impedirlo?
CCOO y UGT entendemos que es IMPOSIBLE que no se advirtiese a Correos del riesgo, como parece insinuar -sin aportar prueba alguna- la versión de la empresa, aunque la alternativa, en caso de creernos esta versión de Serrano, sería que el propio Gobierno en Moncloa y el Ministerio de Interior “se olvidaron” de que en Correos, existía un riesgo para más de 50.000 personas, que podían estar manipulando a lo largo de toda la cadena de admisión, clasificación, transporte y entrega, envíos potencialmente peligrosos para su seguridad (y su vida), sin que a estas alturas sea descartable que aparezcan más envíos explosivos.
Estamos ante OTRA PRUEBA DE LAS PRIORIDADES de Serrano, a quien puede haber importado más ocultar y esconder la información para que una mayor seguridad no ralentizase la “máquina” de repartir paquetes del Black Friday. Si para conseguirlo alguien pierde la vida porque puede haber bombas entre los millones de paquetes, pues mala suerte. Porque lo único cierto es que, sea responsabilidad de quien sea, ESE RIESGO HA EXISTIDO Y NO SE HAN PUESTO LOS MEDIOS PARA EVITARLO.
CCOO y UGT hemos denunciado en prensa esta gravísima irresponsabilidad, y seguimos exigiendo que se adopten cuantas medidas de seguridad sean necesarias para no poner en riesgo la seguridad de la plantilla de Correos. Es inadmisible gestionar un asunto como este jugando a la “ruleta rusa” con la vida de los empleados postales.
CCOO y UGT también exigen que, ante unos hechos tan graves, que ya traen cola tras lo ocurrido con los envíos de sobres con munición en 2021, deben DEPURARSE RESPONSABILIDADES al máximo nivel, tanto en el interno de la propia empresa pública como en los órganos superiores para los que parece que, por error, omisión y/o premeditación, se ocultó un riesgo real que podía haberle costado caro (incluso la vida) a más de un trabajador.
